Un incendio obligó a suspender temporalmente la COP30 en Belém (Brasil) y a desalojar a miles de asistentes. El siniestro, registrado alrededor de las 14.00 hora local del 20 de noviembre, se originó en la zona de pabellones, cerca del espacio destinado a España, generando un fuerte olor a quemado. Según el Ministerio de Salud, 21 personas fueron atendidas: 19 por exposición al humo y dos por episodios de ansiedad. Todas fueron dadas de alta la tarde del jueves, sin que se registraran quemaduras.
La presidencia brasileña de la COP informó que el fuego fue controlado en unos seis minutos gracias a la intervención inmediata de bomberos y equipos de seguridad de la ONU. Aun así, las imágenes del humo y la evacuación circularon rápidamente entre los asistentes y en redes sociales. Tras casi siete horas de cierre, las instalaciones reabrieron alrededor de las 20.40 para permitir la reanudación de las negociaciones.
El incendio se originó en el pabellón de India, dentro de la zona azul —bajo responsabilidad de Naciones Unidas—, y las autoridades evalúan que pudo deberse a una sobrecarga eléctrica. Poco después del incidente, el ministro de Turismo, Celso Sabino, aseguró que la situación estaba bajo control y destacó que no hubo lesionados.
La presidencia de la COP30 señaló que, junto con la Convención Marco de la ONU para el Cambio Climático, decidió cerrar temporalmente la zona azul hasta completar una revisión integral de seguridad. Con la verificación concluida, los delegados de casi 200 países regresaron a las mesas de negociación, aunque la ONU anunció que no habrá sesiones plenarias al menos hasta la mañana del viernes.
Los bomberos, que encontraron el recinto sin luz y sin suministro eléctrico, abrieron y rompieron varias carpas para permitir la salida del humo acumulado. Mientras tanto, miles de asistentes esperaron al exterior hasta que los organizadores confirmaron que el acceso no sería restablecido hasta entrada la noche. Una crítica reiterada entre los participantes fue la ausencia de una alarma sonora que señalara la evacuación, lo que obligó a que muchos se alertaran entre sí.
Este episodio ocurre días después de que la ONU enviara una carta a Brasil solicitando mejoras en la seguridad y en la infraestructura del evento, tras un incidente en el que un grupo indígena irrumpió en la zona de negociaciones. La organización ya había expresado preocupación por deficiencias en el sistema de seguridad, fallos en el aire acondicionado e inundaciones previas por las lluvias.
El incendio se produjo en pleno debate sobre una hoja de ruta para abandonar progresivamente el petróleo, gas y carbón —principales causantes del calentamiento global—, una propuesta impulsada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva y respaldada por unos 80 países, pero con fuerte resistencia de otros gobiernos que complican su aprobación.
Fuente: https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2025-11-20/un-incendio-obliga-a-suspender-y-desalojar-la-cumbre-del-clima-de-brasil.html
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