lunes, 21 de octubre de 2024

Pemex nuevamente responsable por derrame, ahora en Papantla.

Pemex, nuevamente responsable de un derrame de hidrocarburos que lleva 42 días afectando a comunidades indígenas en Papantla, reconocido como patrimonio de la humanidad por la UNESCO en tres ocasiones.


Las comunidades totonacas han denunciado que, desde el inicio del derrame el 21 de agosto, las autoridades han sido omisas, discriminatorias y negligentes en la atención de un incidente que ya ha contaminado 12 kilómetros de un arroyo del Río Cazones. Es urgente que el Estado mexicano y la UNESCO asuman su responsabilidad en la protección y conservación de este territorio, declarado patrimonio de la humanidad.


Demandamos la remediación y atención inmediata, así como las garantías necesarias para evitar que esto vuelva a suceder, y la sanción correspondiente a la empresa responsable. La comunidad totonaca de Ojital Viejo, en el municipio de Papantla, Veracruz, ha estado expuesta a un derrame de hidrocarburos que ha provocado la muerte de especies nativas y animales domésticos, contaminando pozos artesianos y parcelas de cultivo, lo que pone en riesgo la salud e integridad de las poblaciones vecinas de Papantla y Coatzintla, donde corre el arroyo afectado, afluente del Río Cazones que desemboca en el Golfo de México.


Durante un recorrido realizado por la Alianza Mexicana contra el Fracking los días 28 y 29 de septiembre, se obtuvieron pruebas de que el derrame sigue sin recibir la atención adecuada. Un grupo de ocho trabajadores de Pemex, carentes de equipo de seguridad y con herramientas rudimentarias, se limita a retirar el suelo contaminado y colocarlo al lado del arroyo, sin implementar medidas de seguridad que protejan el suelo y los cuerpos de agua, lo que agrava la situación con las lluvias que cayeron nuevamente el 1 de octubre.


Los habitantes de Ojital Viejo, Papantla y El Chote, Coatzintla, han denunciado un trato despótico y discriminatorio, así como la negligencia de Pemex y otras autoridades responsables de manejar el desastre, que comenzó el 21 de agosto. Hasta ahora, no ha habido acercamientos por parte de las autoridades para atender la flora y fauna endémica afectada, ni la salud de los residentes. Tampoco se ha proporcionado información oportuna sobre el alcance del derrame y las medidas para controlarlo y remediarlo.


Ante esta situación, los habitantes de la región se han organizado para exigir atención adecuada y han hecho un llamado a la sociedad para unirse al apoyo solidario, informando a través de redes sociales sobre el desastre, realizando brigadas para atender a la fauna afectada, y acompañando e informando a la población sobre los impactos del derrame. Las acciones del Estado continúan siendo mínimas, discriminatorias y revictimizantes.


Derrame en Ojital Viejo, Papantla

La comunidad local identificó el derrame el 21 de agosto, al detectar un olor a azufre en la parte alta de la comunidad, lo que alertó a los vecinos y autoridades comunitarias que se dedicaron a buscar el punto de fuga, el cual se localizó en uno de los dos oleoductos que, junto con dos gasoductos, atraviesan la comunidad, exponiéndolos a un riesgo constante debido a incidentes recurrentes en estas instalaciones que tienen más de 70 años de servicio sin el mantenimiento adecuado por parte de Pemex. Los habitantes de Ojital Viejo informaron que en septiembre del año pasado sufrieron una fuga de gas en uno de los gasoductos durante varios días, y recordaron que el oleoducto ahora reportado ya había causado desastres en el pasado, hace 4 y 10 años. También mencionaron que las comunidades de El Tajín, El Chote Coatzintla y otras han enfrentado continuamente este tipo de desastres y que siempre son mal atendidos por Pemex, que deja lodos contaminados y cultivos afectados sin implementar soluciones efectivas para prevenir estos eventos.


Este problema no es un hecho aislado, sino parte de una serie de impactos derivados de la actividad petrolera en la región, que, a pesar de ser reconocida como patrimonio de la humanidad en tres ocasiones por el sitio arqueológico de El Tajín, la ceremonia de los Voladores de Papantla y el Centro de las Artes Indígenas, es considerada por Pemex y las autoridades de México como una zona de sacrificio.


Las comunidades afectadas, la AMCF y los firmantes de este documento exigen:


– Que Pemex retire de inmediato los lodos y otros materiales contaminados, asumiendo la responsabilidad y el financiamiento para restaurar los ecosistemas y cultivos afectados, así como la atención a las personas impactadas.


– Que Pemex realice el mantenimiento necesario de sus ductos e instalaciones, especialmente aquellas que atraviesan pueblos y comunidades.


– Que se implementen las medidas pertinentes para prevenir futuros incidentes.


– Que las autoridades responsables de regular las operaciones de Pemex tomen acciones para sancionar a la empresa de manera ejemplar.


– Que el Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo destine recursos para la remediación de los sitios contaminados por hidrocarburos.


Fuente: https://www.greenpeace.org/mexico/noticia/54653/pemex-una-vez-mas-responsable-de-derrame-de-hidrocarburos-que-afecta-desde-hace-42-dias-a-comunidades-indigenas-de-papantla-tres-veces-nombrada-patrimonio-de-la-humanidad-por-la-unesco/#:~:text=Cambio%20climático-,Pemex%2C%20una%20vez%20más%2C%20responsable%20de%20derrame%20de%20hidrocarburos%20que,la%20humanidad%20por%20la%20UNESCO

 

Comunidades Mayas Solicitan Declaratoria de Emergencia Socioambiental para la Península de Yucatán

 


Ante la grave crisis que afecta al territorio, los ecosistemas y la vida del pueblo maya en la península, hoy representantes de las comunidades mayas de Yucatán, Campeche y Quintana Roo informaron al gobierno federal sobre su decisión de declarar la Península de Yucatán como zona de emergencia socioambiental. Solicitaron la implementación de medidas que frenen el deterioro social y ambiental que ha aumentado en los últimos años, afectando principalmente a los pueblos indígenas.


A través de un documento dirigido a la Presidenta de la República, la Secretaría de Medio Ambiente, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Comisión Nacional del Agua, la Secretaría de Desarrollo Urbano y la Secretaría de Salud, que también se entregará a los gobernadores de Campeche y Quintana Roo, los representantes mayas subrayaron la necesidad de adoptar medidas urgentes para abordar las serias afectaciones causadas por un modelo de desarrollo que ha conllevado pérdidas significativas de territorio y ecosistemas en la región.


La deforestación, la contaminación del agua, la muerte masiva de abejas y el daño a la apicultura, así como la pérdida de la certificación orgánica de la miel debido a la proximidad de granjas porcinas y avícolas, la desaparición de semillas nativas y territorios indígenas, el colapso del tejido social y el deterioro de la salud en las comunidades son consecuencias de la implementación de varios megaproyectos en la península. Estos están generando una crisis socioambiental sin precedentes, cuyos efectos pueden ser irreversibles. Esto incluye la agricultura industrial, que abarca la siembra ilegal de maíz y soya transgénicos, causando la destrucción de grandes extensiones de selva y la utilización intensiva de agroquímicos, que dañan a las abejas, impactando la polinización y destruyendo un medio de subsistencia fundamental para el pueblo maya. Estos productos químicos también dificultan la obtención de certificaciones orgánicas para la miel y limitan su precio. Asimismo, más de 800 fábricas de cerdos y aves, muchas de las cuales operan sin evaluaciones de impacto ambiental, contaminan el agua y destruyen bosques y apiarios. También se menciona el crecimiento descontrolado de concesiones mineras y la expansión inmobiliaria que invaden la costa, reduciendo las comunidades a meras colonias urbanas, lo que solo es posible por la colusión de instituciones agrarias que permiten la venta y despojo de ejidos. Además, el proyecto del Tren Maya ha causado la destrucción de cenotes y la deforestación de millones de árboles, y las cerveceras han secado y salinizado los mantos freáticos, contribuyendo a la destrucción del entorno natural y a la pérdida del territorio, así como a la aniquilación de la integridad cultural del pueblo maya.


Muchas de estas actividades y sus consecuencias han sido denunciadas por diversas vías ante autoridades administrativas, judiciales y políticas. Sin embargo, la administración federal que acaba de concluir su mandato no garantizó nuestro derecho a la libre determinación ni tomó las acciones adecuadas para abordar esta crisis socioambiental, a pesar de las numerosas insistencias por parte de los pueblos mayas. Nos preocupa que la actual Secretaria del Medio Ambiente, Alicia Bárcenas, no priorice la península de Yucatán, a pesar de ser la región más deforestada del país y una de las más afectadas por los megaproyectos recientes.


La solicitud de una declaratoria de emergencia socioambiental surge del análisis conjunto de las consecuencias que las actividades humanas mencionadas tienen en nuestro territorio, y se basa en la acumulación de impactos sobre nuestros ecosistemas.


Cabe recordar que el gobierno federal ya ha establecido Regiones de Emergencia Sanitaria y Ambiental, definidas a través del Programa Nacional Estratégico (PRONACES) de Agentes Tóxicos y Procesos Contaminantes del Conahcyt. Estas regiones están identificadas como áreas geográficamente delimitadas que enfrentan un estrés sanitario y ambiental extremo y creciente debido a factores demográficos, económicos o políticos, y que se caracterizan por presentar un daño significativo a la salud humana y al medio ambiente, afectando elementos como el aire, el agua, los suelos y la biodiversidad.


La Ley General de Protección Civil también permite a los organismos que conforman el Sistema de Protección Civil declarar estados o zonas de emergencia por daños socioambientales derivados de actividades antrópicas.


Por lo tanto, existen fundamentos legales para que el gobierno federal y los gobiernos estatales implementen medidas que detengan los severos impactos socioambientales causados por los megaproyectos en la península de Yucatán, se adhieran a la declaratoria de emergencia socioambiental que hoy estamos realizando las comunidades, y establezcan todas las medidas necesarias para investigar, sancionar y reparar los daños causados, con el fin de revertir la grave crisis que afecta a la Península de Yucatán, y en particular al pueblo maya.


U múuk’il k’áax yéetel u t’aanil u yóol máaya wíiniko’ob way yóok’olkaabe’  

La resistencia de la selva y la voz del corazón del pueblo maya.


Fuente: https://www.greenpeace.org/mexico/noticia/54695/comunidades-del-pueblo-maya-presentan-solicitud-de-declaratoria-de-emergencia-socioambiental-para-la-peninsula-de-yucatan/

Un Santuario Sostenible para Inmigrantes en el Bronx: La Visión de la Arquitecta Colombiana Zarith Pineda


En un espacio destinado a los recién llegados a la ciudad que no tienen dónde alimentarse, se planea ofrecer unas 5.000 comidas gratuitas cada semana. Zarith Pineda, vestida con gafas de sol, un chaleco de construcción y con las manos manchadas de tierra del sur del Bronx, ha diseñado un jardín comunitario que se transforma en un refugio para aquellos sin un hogar seguro, especialmente inmigrantes que buscan comida. Desde temprano en la mañana, mujeres siembran semillas de calabaza y durazno, hombres levantan un muro ladrillo por ladrillo y el vecino José Matas colabora según lo que se necesite, formando parte de la comunidad del nuevo santuario urbano H.earth, situado cerca de la autopista Bruckner, en un vecindario predominantemente afroamericano e hispano de Nueva York.


Pineda, una arquitecta y diseñadora urbana de 32 años, llegó de Colombia a Boston con su familia a la edad de ocho. Observó cómo su madre, también arquitecta, no era tomada en serio en Estados Unidos. Se graduó de la Escuela de Arquitectura de Tulane en 2015 y obtuvo su maestría en la Universidad de Columbia en 2017. “Éramos muy pocas las mujeres en el campo de la arquitectura, y casi nunca latinas. Aquí es más complicado ser arquitecta que cirujano”, confiesa. Actualmente, forma parte del 2% de mujeres de color que son arquitectas y urbanistas en el país, y ha reconocido que el problema está relacionado con el racismo sistémico e institucional en la arquitectura.


La organización sin fines de lucro Territorial Empathy, que fundó en 2018, es la primera ONG latina enfocada en el diseño comunitario en Nueva York, un lugar que Pineda describe como "litigante" y costoso, donde su trabajo es poco remunerado y nadie quiere asumir la responsabilidad. “¿Por qué quiero tomar las riendas de algo que nadie quiere hacer? Porque soy terca y porque soy latina”, responde. Su intención es desarrollar un proyecto profesional que promueva “más empatía hacia nuestros espacios urbanos, los lugares, el medio ambiente, y la comunidad”.


Con una subvención de 200.000 dólares del Laboratorio de Prácticas del re:arc institute, una organización filantrópica danesa que une la acción climática con la arquitectura, Pineda ha querido materializar ideas que muchos antes rechazaron. Para ello, se asoció con la familia propietaria del restaurante mexicano La Morada, un espacio de apoyo mutuo que durante la pandemia ofreció comida a miles de migrantes y que ahora alimenta a cientos de personas.


En el santuario urbano H.earth, que abarca 2.000 pies cuadrados y que antes fue el jardín Bruckner Mott Haven, se eleva una alta chimenea de ladrillos terracota. Pineda la diseñó no solo como un horno indígena tradicional, sino para que el jardín se autoabastezca de agua. Cuando llueve, el agua del techo se recoge en una estructura que la filtra en un tanque de contención, eliminando el 95% de las impurezas. El agua recolectada se usa para regar las diversas plantas, vegetales y frutos de temporada que crecen en los lechos de cultivo y en el vivero, que se utilizará para proteger las plantas del frío en invierno. Con la producción esperada, se repartirán aproximadamente 5.000 comidas gratuitas a la comunidad cada semana.


Pineda también sostiene que un factor poco discutido detrás de la migración desde América Latina es el cambio climático. Un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indica que el Centro de Monitoreo del Desplazamiento Interno registró más de 1,6 millones de desplazamientos por desastres en la región en 2021. Además, el Banco Mundial anticipa que para 2050 habrá alrededor de 17 millones de migrantes climáticos en América Latina. “Muchos países centroamericanos dependen de la agricultura, pero enfrentan sequías devastadoras por fenómenos como El Niño o La Niña, lo que los obliga a emigrar”, explica. “No se reconoce que esto también es un problema climático. Al llegar aquí, no son bien recibidos. Son personas que sufren y tienen conocimientos sobre cómo cultivar, interpretar el suelo y el clima”, añade.


Por ello, ellos serán los encargados del santuario. Pineda relata que al evaluar el proyecto, las conversaciones con la comunidad mostraron el deseo de crear un espacio “para los recién llegados” a la ciudad, quienes estaban llegando expulsados desde Texas por el gobernador Greg Abbott. “Así que decidimos que debía ser un lugar que transmita un sentido de comunidad, cuidado y relajación”, dice.


El espacio ha sido construido con energía solar y cuenta con paneles para su funcionamiento, tendrá un inodoro sostenible y está diseñado para que la comunidad no gaste en facturas de electricidad o agua. H.earth será un lugar donde las personas podrán comer, relajarse, participar en actividades comunitarias o simplemente ser parte de algo. Un “lugar seguro”, según Pineda.


“Al ser colombiana, mujer y emigrante, te das cuenta de que no todos tienen la misma seguridad en los espacios públicos”, explica. “Cuando estaba en la universidad, me preguntaba cómo se podrían reconstruir los espacios destruidos por el conflicto en Colombia. Lo sentí en mi infancia, donde había lugares que habían desaparecido. En Colombia, vivimos el conflicto armado más prolongado del hemisferio, así que al crecer allí, desarrollas un entendimiento espacial sobre lo que significa la seguridad en los lugares, que varía según las circunstancias políticas”.


Pineda no se considera una experta, pero tiene “un poco de conocimiento en muchas áreas”. Desde mayo, la pueden ver en el Bronx desde la mañana hasta el atardecer, diseñando planos, arando la tierra y conversando con los vecinos. “Esto ha sido un trabajo de amor y confianza”, dice, sin buscar reconocimiento personal. Sabe que “los verdaderos expertos son los miembros de la comunidad”, quienes se encargarán de sembrar, alimentarse y cuidarse mutuamente en medio de la adversidad.


Fuente: https://elpais.com/us/2024-10-21/un-santuario-autosostenible-para-los-inmigrantes-en-el-bronx-el-proyecto-de-la-arquitecta-colombiana-zarith-pineda.html

Estudio Revela Aumento del 15,8% en la Superficie Quemada Global Debido al Cambio Climático

 


Un estudio evalúa por primera vez el incremento de la superficie afectada por incendios en el mundo debido al cambio climático: un 15,8% en 16 años.


Australia, Siberia y América del Sur son algunas de las regiones donde el calentamiento global está provocando un mayor aumento en el área impactada por el fuego. Las investigaciones que atribuyen eventos climáticos adversos al calentamiento global representan un avance significativo en la ciencia climática en años recientes. Gracias a los avances en computación, se pueden llevar a cabo simulaciones complejas que determinan cuánto ha influido el cambio climático provocado por el ser humano en fenómenos meteorológicos específicos, como el aumento de la intensidad de tormentas o la probabilidad de olas de calor en un mundo sin gases de efecto invernadero. En el caso de los incendios, la tarea es más compleja debido a que son eventos multifactoriales, lo que complica las estimaciones sobre las áreas quemadas. Sin embargo, un equipo de científicos del Reino Unido y Bélgica ha cuantificado, por primera vez, el aumento global de las áreas quemadas y ha encontrado que el cambio climático ha incrementado en un 15,8% la superficie afectada por incendios entre 2003 y 2019.


En otras palabras: "sin el cambio climático, habríamos registrado un 15,8% menos de superficie quemada en el periodo 2003-2019", explica Seppe Lampe, investigador de la Universidad Libre de Bruselas y autor principal del estudio publicado en la revista Nature Climate Change. La coautora principal es Chantelle Burton, científica del Centro Hadley de la Oficina Meteorológica del Reino Unido. Lampe menciona que este es el primer análisis que proporciona una estimación de la superficie afectada a nivel mundial, aunque ya existen investigaciones regionales, como en el oeste de Estados Unidos y Australia.


El estudio publicado este lunes destaca diversas tendencias sobre la evolución de las áreas quemadas en la Tierra, tanto a nivel global como regional. A nivel mundial, los investigadores estiman que el área afectada por incendios debido al cambio climático aumenta a un ritmo del 0,22% anual. Sin embargo, al analizar los detalles, se observan zonas que han sido impactadas de manera mucho más severa que otras. De las 43 regiones en las que se han clasificado los continentes, el centro de Australia es la más afectada, con un aumento anual del 3,04%. En este caso, los autores sostienen que el cambio climático ha causado un crecimiento del área afectada por el fuego del 61,9% entre 2003 y 2019, casi cuatro veces más que la media mundial (15,8%). Otras regiones que superan significativamente la media son el sureste de América del Sur (28,9%) y Siberia occidental (17,5%). En la región mediterránea, que incluye a España, también se observa un incremento por encima de la media global, con un aumento del 16,9% en el periodo analizado.


“El efecto del cambio climático en el área quemada seguirá en aumento”, resalta Lampe. “En la actualidad, estamos viendo un crecimiento del área quemada global de 0,22% al año. Esto implica que dentro de 10 años, habrá un 2 o 2,5% adicional de área quemada cada año”, advierte. En su artículo, los investigadores emiten un aviso: “esta tasa anual también se incrementa con el tiempo, lo que sugiere que las tendencias podrían acelerarse en las próximas décadas”.


Cambios en el uso del suelo


A pesar de la influencia del calentamiento global, Lampe aclara que, en términos generales, el área quemada en el planeta ha disminuido ligeramente en las últimas dos décadas. “Esta disminución se debe principalmente a la reducción de la superficie quemada en las sabanas africanas, normalmente relacionada con un aumento en la fragmentación del paisaje”, añade Lampe. Esto forma parte de lo que se denomina “forzamientos humanos”. Por ejemplo, el cambio en el uso del suelo: convertir áreas boscosas en tierras de cultivo o pastizales. “Lo que estamos demostrando es que, sin el cambio climático, la superficie quemada habría disminuido aún más”, señala este investigador de la Universidad Libre de Bruselas.


Los investigadores estiman que los forzamientos humanos han llevado a una reducción del 19,1% en la superficie quemada a nivel mundial entre 2003 y 2019 (comparado con el periodo 1901-1917). Sin embargo, esta reducción se ve prácticamente anulada por la crisis climática. Esto significa que, mientras el calentamiento global provoca un aumento en las áreas quemadas, los forzamientos —como el cambio en el uso del suelo (que reduce la cobertura forestal) y el aumento de la densidad poblacional— tienden a reducir el área afectada. En este momento, estos fenómenos parecen estar equilibrándose, aunque no está claro si esta tendencia continuará.


“Nuestros modelos sugieren que los efectos de los forzamientos humanos directos están contrarrestando los impactos del cambio climático en las áreas quemadas en muchas regiones del mundo, lo que resulta en la estabilización o ligera disminución de las áreas quemadas a nivel global”, indica el artículo publicado en Nature Climate Change. “Sin embargo, la magnitud del cambio climático está aumentando rápidamente, lo que sugiere que los incendios tendrán un impacto más fuerte en el bienestar humano y en la dinámica de los ecosistemas en un futuro cercano”, añade el estudio. “Por lo tanto, es probable que se necesiten tanto esfuerzos ambiciosos para mitigar el cambio climático como adaptaciones a los impactos específicos del creciente riesgo de incendios como parte de estrategias sostenibles de gestión de la tierra y de incendios”, afirman los investigadores.


“Nuestros hallazgos subrayan la urgencia de implementar reducciones inmediatas, drásticas y sostenidas de las emisiones de gases de efecto invernadero, junto con estrategias de manejo del paisaje y del fuego, para estabilizar los impactos de los incendios en la vida, los medios de subsistencia y los ecosistemas”, concluyen los autores del estudio. Esto se debe a que los incendios no solo son impulsados por el cambio climático, sino que también contribuyen a este al liberar más dióxido de carbono a la atmósfera. Además, generan importantes repercusiones en “la calidad del aire y la salud”, advierte el equipo de expertos que firma el artículo.


Fuente: https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2024-10-21/un-estudio-cifra-por-primera-vez-el-aumento-de-la-superficie-quemada-en-el-planeta-debido-al-cambio-climatico-un-158-en-16-anos.html


Earthships: casas en Nuevo México que son ejemplo para combatir el cambio climático


 Si te adentras en el impresionante y árido desierto de Nuevo México, podrías encontrar casas únicas y singulares (algunas lujosas y con formas esculturales; otras evocando templos antiguos) que parecen sacadas de una película de "La guerra de las galaxias". Estas son las Earthships, ubicadas en Taos y sus alrededores, donde se crearon hace casi cuatro décadas. Estas viviendas sostenibles, que cuentan con emisiones netas cero, están hechas principalmente de materiales reciclados y naturales, como neumáticos usados, botellas de vino vacías, barro y madera. Debido a que requieren menos materiales nocivos y emisores de carbono, como plásticos y hormigón, las Earthships están ganando popularidad en todo el mundo. Su precio oscila entre 500,000 y 900,000 dólares, y se pueden alquilar en Taos y áreas cercanas por aproximadamente 240 dólares la noche. 


El movimiento Earthship nació en Taos en los años 70, cuando Michael Reynolds, originario de Kentucky y fundador de la constructora ecológica Earthship Biotecture, se trasladó a la región en 1969 después de graduarse en arquitectura. Su objetivo inicial era "montar en moto por diversión", como él mismo menciona. Un día, tuvo una epifanía tras ver a Walter Cronkite, famoso presentador de CBS News, hablar sobre la deforestación y su impacto negativo en el oxígeno. "Vi todas esas latas de cerveza en la basura y pensé: '¿Por qué no construir con ellas en lugar de talar árboles?'", comenta Reynolds a la BBC. En 1971, construyó su primera casa de latas de cerveza, aunque no recibió mucha atención en su momento. Sin embargo, más tarde fue exhibida en lugares como el Museo del Louvre y el Museo de Arte Moderno (MoMA) en Nueva York. 


Reynolds se sorprende al mencionar que "el MoMA adquirió un ladrillo de latas de cerveza por 4,500 dólares". A pesar de su singularidad, durante años fue visto como un excéntrico y no como un arquitecto legítimo. "Era una idea algo ingenua y ridícula, pero seguí adelante", dice. Con el tiempo, empezó a usar botellas y neumáticos, y ha dedicado más de 55 años a esta causa, etiquetando su primera Earthship hace aproximadamente 36 años. 


La aceptación de las Earthships ha tomado tiempo. "Parecían demasiado raras, pero ahora la gente comienza a comprenderlas, especialmente porque muchos enfrentan problemas de vivienda y altos costos de servicios", afirma Reynolds sobre la capacidad de vivir fuera de la red eléctrica. "La gente quiere revertir el cambio climático". Taos ha sido un refugio para artistas e individualistas, con una arquitectura sorprendente que mezcla casas tradicionales de adobe y madera. 


Las Earthships cuentan con gruesas paredes de neumáticos llenos de tierra y están rodeadas por un terraplén que actúa como aislante. La refrigeración se logra mediante ventanas en las vigas, permitiendo la ventilación cruzada. Cada casa incluye un invernadero para cultivar alimentos, y la mayoría opera con energía solar, aunque algunas cuentan con turbinas eólicas o estufas de leña. A pesar de los inviernos fríos y veranos cálidos de Taos, el interior de una Earthship se mantiene a 21 °C durante todo el año. 


Reynolds ha vivido en su primera Earthship durante 35 años y ha criado a su familia allí: "Es tan cómodo que no queremos irnos", asegura. ¿Cómo se siente estar dentro de una Earthship? Deborah Binder, directora de construcción de Earthship, dice que "se siente como estar en un útero", donde siempre hay una temperatura agradable. Binder, que se unió a la empresa hace 11 años sin experiencia previa en construcción, actualmente alquila una Earthship mientras construye la suya y enseña en la Earthship Academy. 


A pesar de su atractivo ecológico, las Earthships aún no son vistas como una solución viable para la crisis de vivienda y el cambio climático. "Siguen estando al margen", comenta Binder. "Es fundamental que las personas vivan en ellas para experimentar su singularidad y la ausencia de facturas de servicios". Reynolds asegura que, tras probarlas, la mayoría de las personas desean tener una. Su objetivo es que las Earthships se conviertan en un estándar, creando viviendas comunitarias accesibles que respondan a la falta de hogar y la necesidad de un consumo energético más responsable. 


"No me interesan mucho los encargos; tener un cliente me ralentiza", explica. "Necesito producir rápido y arrendar a precios justos". Actualmente, se encuentra trabajando en su modelo Refuge Earthship, que busca aliviar la falta de vivienda y pobreza al eliminar grandes facturas de servicios. "Refuge es el modelo más asequible que construiremos, el que replicaremos globalmente", afirma. También tiene en mente la impresionante Atlántida, una casa de diseño artístico con curvas. "Hay un aspecto artístico en ellas; jugué con botellas como vitrales. Son hermosas", dice Reynolds. "Lo más valioso es que cuidan a las personas y al planeta. Una casa tiene un significado en el arte que no tiene comparación”.


Fuente: https://www.bbc.com/mundo/articles/cn03p5le27jo

Inusuales inundaciones en el Sahara tras 50 años de sequía

 

Impresionantes imágenes muestran raras inundaciones en el desierto del Sahara, algo que no ocurría en medio siglo. Dos días de intensas lluvias superaron los promedios anuales en Marruecos, generando un inusual diluvio en el desierto más grande y cálido del mundo, que abarca una docena de países en África.


Houssine Youabeb, de la agencia meteorológica de Marruecos, comentó a la Associated Press que habían pasado entre 30 y 50 años desde que se registraba tanta lluvia en tan poco tiempo. Estos fenómenos podrían alterar los patrones climáticos de la región en los próximos meses.


El sureste de Marruecos, uno de los lugares más secos del planeta, rara vez experimenta lluvias al final del verano. Sin embargo, en Tagounite, a 450 kilómetros de la capital, Rabat, cayeron más de 100 milímetros de agua en solo 24 horas. Los expertos atribuyen esta situación a una tormenta extratropical, generada por el aumento de la humedad en el aire, lo que facilita la evaporación y desencadena más tormentas.


Imágenes satelitales de la NASA revelaron que el lecho de un lago, seco durante 50 años entre Zagora y Tata, comenzaba a llenarse nuevamente. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) señala que el ciclo del agua está cambiando más frecuentemente a nivel global, impulsado por el aumento de las temperaturas.


Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, advirtió que el ciclo hidrológico se ha acelerado, volviéndose más errático e impredecible, lo que genera problemas tanto de exceso como de escasez de agua. Con el calentamiento global haciendo más comunes los fenómenos extremos, los científicos prevén que tormentas similares podrían repetirse en el Sahara en el futuro.




Fuente: https://www.bbc.com/mundo/articles/cwyl41xvy1go

Activistas de Greenpeace de 12 países se movilizan para exigir la protección de la biodiversidad en la COP16.


Desde Indonesia hasta México, pasando por Suecia y Hungría, llevaron a cabo manifestaciones visuales para demandar a los gobiernos reunidos en la Cumbre de Biodiversidad de la ONU en Cali, Colombia, que prioricen la protección y restauración de los ecosistemas.

En las últimas 24 horas, diversas acciones se llevaron a cabo en Austria, Alemania, Rumania, España y Reino Unido, entre otros países. Estas protestas incluyeron proyecciones en lugares emblemáticos como el Puente de la Torre en Londres y el parlamento en Estocolmo. En los Países Bajos, se instaló un "árbol de deseos" con mensajes globales sobre biodiversidad, y en Praga, luces LED formaron el mensaje "Esperanza para la naturaleza".


A lo largo del mundo, miles de personas, desde Australia hasta Brasil, enviaron mensajes en línea a los delegados de la cumbre. En paralelo, activistas en Países Bajos y España señalaron la complicidad de los grandes bancos en la destrucción ambiental, y en Polonia llamaron a sus gobiernos a tomar medidas más ambiciosas para proteger la naturaleza.


En México, Greenpeace destacó el impacto negativo de grandes corporaciones en los ecosistemas, con la complicidad del gobierno. La pesca industrial, la agricultura y la industria plástica son algunas de las actividades que han devastado ecosistemas como la Selva Maya. Desde 2019, la Península de Yucatán ha perdido más de 285,580 hectáreas de bosque, y el criticado proyecto del Tren Maya recibió gran parte del presupuesto para mitigación climática, en detrimento de la conservación de la biodiversidad.


Con la COP16 como oportunidad clave, activistas llaman al gobierno mexicano a asumir compromisos claros y ambiciosos para restaurar la Selva Maya y los océanos. También instan a que se aceleren los esfuerzos globales para cumplir con el objetivo 30×30, que busca proteger el 30% de los ecosistemas terrestres y marinos para el 2030.


Fuente: https://www.greenpeace.org/mexico/noticia/54734/activistas-en-12-paises-se-reunen-por-priorizar-la-naturaleza-en-la-cumbre-de-biodiversidad-cop16/

Inicio de la COP16 en Colombia: 196 Países se Unen para Frenar la Pérdida de Biodiversidad


La cumbre climática COP16 reúne en Cali, Colombia, a 196 países para abordar la pérdida de biodiversidad. Durante el evento, que se llevará a cabo del 21 de octubre al 1 de noviembre de 2024, las autoridades y expertos discutirán metas y revisarán el estado actual de los ecosistemas degradados, la conservación y las emisiones de gases de efecto invernadero.


Colombia, anfitriona de esta conferencia, refuerza su posición en la agenda global de biodiversidad. La ceremonia de apertura, presidida por el presidente Gustavo Petro y autoridades locales, resaltó el papel de América Latina en la lucha contra el cambio climático. La COP16 será una oportunidad clave para evaluar el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, adoptado en la COP15 de 2022. Este plan establece 4 objetivos y 23 metas que los países deben alcanzar para 2030, como la conservación del 30% de las zonas terrestres y marinas y la restauración del 20% de los ecosistemas degradados.


El evento tiene como símbolo a la Flor de Inírida, planta endémica de Colombia, y su eslogan “Paz con la Naturaleza” refleja el llamado a una mejor relación entre la humanidad y el medioambiente. La COP16 será crucial no solo para Colombia, sino para toda América Latina y el Caribe, reafirmando su liderazgo en la protección del clima y la biodiversidad, en vísperas de la COP30 en Brasil en 2025.


El Convenio sobre la Diversidad Biológica, firmado en la Cumbre de la Tierra en 1992, ha sido el marco internacional para proteger los ecosistemas. Durante la COP16, los países deberán convertir estos compromisos en acciones concretas. António Guterres, secretario general de la ONU, urgió a que los gobiernos pasen de las palabras a los hechos, ya que la protección de la biodiversidad es esencial para un futuro sostenible y la estabilidad económica mundial.


Además, la conferencia tratará la interrelación entre biodiversidad y cambio climático. Se ha demostrado que ecosistemas saludables, como bosques y océanos, han absorbido gran parte de las emisiones de gases de efecto invernadero en la última década. Por tanto, la protección y restauración de estos ecosistemas no solo frena la pérdida de biodiversidad, sino que ayuda a mitigar los efectos del cambio climático, protegiendo a las comunidades más vulnerables.


Los países participantes están presentando sus Estrategias y Planes de Acción Nacionales sobre Biodiversidad (NBSAPs), un requisito para avanzar en la implementación del Marco Global de Biodiversidad. A medida que se acerca la COP16, aún se espera que muchos países actualicen sus compromisos, siguiendo el ejemplo de España, Francia y Japón.


Guterres advirtió que un colapso en los servicios de la naturaleza tendría consecuencias económicas devastadoras, afectando principalmente a los más pobres. Subrayó la importancia de alinear las acciones nacionales con los objetivos del Marco de Kunming-Montreal, como un paso esencial hacia la protección de los ecosistemas y el bienestar humano.


Fuente: https://www.infobae.com/america/medio-ambiente/2024/10/21/cumbre-climatica-cop16-en-colombia-196-paises-se-reunen-para-frenar-la-perdida-de-biodiversidad/