La ONU ha emitido una alerta: el mundo se dirige hacia un aumento de temperaturas de hasta 3 grados si se sigue la trayectoria actual. A pesar de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) acordadas por 149 países, se prevé que la temperatura global aumente entre 2,5 y 2,9 grados, muy por encima del objetivo de 1,5 grados del Acuerdo de París.
Los datos de 2023 siguen encendiendo alarmas entre los científicos. Durante 86 días hasta octubre, se superó el límite de 1,5 grados. Septiembre fue el mes más caluroso jamás registrado, con una temperatura global promedio 1,8 grados por encima de la era preindustrial. En Brasil, semanas antes del verano austral, se experimentó una ola de calor sin precedentes, con una sensación térmica de 52 grados en Río de Janeiro.
"Estamos avanzando hacia un futuro infernal", reiteró Antonio Guterres, secretario general de la ONU. "Este es un fracaso de liderazgo, una traición a los más vulnerables y una gran oportunidad desperdiciada. Las energías renovables nunca han sido tan asequibles y accesibles. Aún podemos alcanzar el límite de 1,5 grados si eliminamos la raíz de la crisis climática: los combustibles fósiles".
Inger Andersen, directora del Programa Ambiental de las Naciones Unidas (UNEP), advirtió sobre el escenario de los tres grados y la necesidad de detener los récords de emisiones, temperaturas extremas y eventos climáticos extremos. La UNEP confirmó un nuevo récord de emisiones entre 2021 y 2022, estimado en 57,4 gigatoneladas a nivel mundial. La brecha entre la tendencia actual y la reducción necesaria del 42% en emisiones para 2030, a fin de mantener el límite de 1,5 grados, sigue siendo considerable.
En un llamado a la comunidad internacional, Guterres enfatizó la importancia de llegar a un compromiso en la COP28 para "triplificar la capacidad de energías renovables para 2030 y planificar la eliminación gradual de los combustibles fósiles con un calendario claro". También criticó los planes de expansión de productores actuales de carbón, gas y petróleo, que equivalen a duplicar el presupuesto de carbono del planeta, lo cual los expertos consideran una acción insensata.
Las palabras de Guterres se interpretan como una advertencia dirigida a los Emiratos Árabes Unidos, que tienen planes de expansión masiva en la producción de gas y petróleo. El sultán Al Jaber, presidente de la COP28 y de la compañía nacional de petróleo de Abu Dhabi (Adnoc), respondió asegurando que la próxima cumbre climática "debe ser un punto de inflexión en esta década crucial para mantener la meta de 1,5 grados y no dejar a nadie atrás”.
Fuente: https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/medio-ambiente/2023/11/21/655ca1dffdddff3e6f8b4594.html
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